Dos “bandos”, tres muertos, centenares de heridos, varios escenarios y ¿UN camino?

policiaYa van más de dos semanas de paro y aún no se vislumbra luz alguna al final del túnel para hablar de una solución real política y pacífica a los múltiples conflictos violentos postelectorales en Bolivia, suscitados a raíz de una serie de manipulaciones que cometió el gobierno de Evo Morales desde hace más de 3 años atrás con miras a garantizar su reelección en las elecciones del pasado 20 de octubre.

La constatación de un gran FRAUDE ELECTORAL registrado en informes de consultores bolivianos y organismos internacionales (incluyendo la OEA), desató una ola de protestas e indignación en decenas de miles de ciudadanos (sobre todo jóvenes) en todo el país.

Hoy se van agudizando los conflictos en que la población boliviana actúa, canta, marcha y bloquea -según su convicción- a favor de uno u otro “bando”. Eres “masista” o “de la oposición”; así nos calificamos. Y así nos enfrentamos, sacando cara por uno de ellos en la familia, en el barrio o en el sindicato u organización social, poniendo el cuerpo, arriesgando la vida, o simplemente manteniendo un silencio buscando un “bando” propio.

Un panorama de confusión y de extrema polarización que requiere de una reflexión profunda, debates y análisis compartido  para orientar mejor nuestro actuar…

Dos "bandos"

  • Por un lado está una buena parte de la población (sobre todo citadina) cansada de 13 años del gobierno "mentiroso”, “manipulador", “entreguista” y “divisionista” de Evo Morales; población que hoy por hoy opta por mantener el paro indefinido y de radicalizar su posición, sin una dirección política clara y presa fácil de nuevos “lideres” (tipo Bolsonaro), como es Luis Fernando Camacho, dirigente del Comité Cívico Pro Santa Cruz.
  • Por otro lado están las bases del MAS, quienes se sienten aún identificados con el “proceso de cambio”; proceso que pudo haber promovido alguna mejora estructural para los sectores populares (más allá de las canchas de futbol y de algunos bonos), sin embargo terminó favoreciendo a la "economía de la coca" (ligada al narcotráfico), a los empresarios del oriente, las empresas transnacionales, los burócratas y los dirigentes de sectores sociales afines al gobierno.

Dos “bandos” que hoy se enfrentan con odio e irracionalidad. Dos “bandos” que representan intereses políticos diferentes, pero que -más allá de sus diferencias- en la práctica muestran mucha similitud. Veamos.

evo camacho

 Ambos “bandos” con sus argumentos y justificaciones:

o Líderes políticos de ambos “bandos” disputan los resultados de las elecciones a su favor -respaldados o no por la OEA- a partir de informes técnicos que confirman un “complejo fraude electoral”. En el fondo ambos disputan nuevos espacios de PODER, buscando respaldo de uno u otro “imperio”.

o Portavoces de ambos “bandos” justifican sus verdades ya sea basándose en la biblia y Dios, ya sea apoyándose en un “líder” infalible. En el fondo ambos nos manipulan con sus discursos a favor de la sagrada “democracia” y de la “libertad”, sin ofrecer un programa serio para un proyecto de país distinto.

o Comunicadores de ambos “bandos” denuncian el abuso del racismo. Por una parte escuchamos gritos discriminatorios contra Evo Morales y sus “indios”, mientras el mismo gobierno busca victimizarse ante la prensa (inter)nacional utilizando imágenes de supuestos actos de “ultrajes contra la mujer indígena”.

alcaldesa

 

(Al respecto existen informes que hablan de una puesta en escena por parte del mismo partido de gobierno –MAS- con el fin de reforzar su posición de “víctima”, no solo de estos actos “racistas”, sino también de un posible “golpe de estado”).

 

 

 

 

 

 

Mientras tanto, las bases de ambos “bandos” se enfrentan en las calles, poniendo sus muertos y heridos, sufriendo incomodidad, inseguridad y un alza de precios.

Intereses políticos

En medio de los conflictos sociales y enfrentamientos hay quienes buscan pescar en río revuelto. Ahí están los sectores organizados del agronegocio de Santa Cruz, quienes -ante la avalancha de protestas en su departamento- tuvieron que pronunciarse a favor o en contra de las movilizaciones.

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Como podemos observar en varios videos que circulan en las redes sociales, los sectores agroindustriales del Oriente, como son la CAO, CAINCO y los ganaderos, hoy prefieren apostar al presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, quien estuvo presente en una reunión del 7 de noviembre, donde se decidió "brindar todo el apoyo al Comité Pro Santa Cruz y al paro indefinido", pese que hasta hace poco estos sectores andaban muy cerca al gobierno de Evo Morales, a tal punto de haber regalado (los ganaderos) un caballo de 50.000 dólares al presidente Morales, en agradecimiento de los “favores” prestados a este sector.

Este espaldarazo es una prueba clara que el sector Camacho, con respaldo de Comités Cívicos y algunos sectores afines, en el fondo están en un mismo tren económico y social que el gobierno de Evo Morales, quien durante más de 10 años favoreció abiertamente al AGRONEGOCIO. Hoy parece que el poderoso sector del agronegocio preferirá seguir adelante con un “líder” que les representa de manera más directa, más cercanamente.

La aparición del “líder” Camacho en Santa Cruz tampoco es casual; responde a un trabajo fino de meses atrás en que una mayoría de los 8 partidos opositores a Evo Morales se fueron comprometiendo con las plataformas, los Comités Cívicos y el mismo CONADE en una serie de reuniones de coordinación.

Los incendios en la Chiquitanía y los dos muertos en Montero a causa de enfrentamientos de la población con masistas - aparte de una larga historia de confrontaciones regionalistas nuevamente atizadas - fueron suelo fértil para los discursos de este líder cívico.

Camacho, estos días, con gran habilidad, mueve decenas de miles de personas en su región y hoy se perfila como un “líder” de la oposición a nivel nacional, buscando coordinar incluso con la organización de cocaleros de Yungas de La Paz, Adepcoca, con mineros, juntas vecinales y otros sectores cívicos, mientras prefirió distanciarse del candidato Carlos Mesa por considerar que éste “no defiende el voto popular, sino su candidatura”.

Diferentes escenarios

Es muy difícil prever lo que espera a Bolivia en los próximos días, más aún a mediano plazo, hasta el 20 de enero, último día del mandato actual del presidente Morales. Se pintan diferentes escenarios, que se manifiestan en varios espacios de debate, en cabildos, en la calle y a nivel de los poderes de los “imperios”.

Escenario 1.

A partir de un resultado de la auditoría de la OEA (el día miércoles 13 de noviembre) a favor del “ganador” Evo Morales en la primera vuelta, posiblemente se desataría una mayor protesta popular, con mayores enfrentamientos y una posible intervención de las fuerzas del orden. Definitivamente la gente en la calle no confía en la OEA y reclama ahora  “nuevas elecciones”, mientras el gobierno habla de que no va a renunciar.

Escenario 2.

Otro escenario se abriría con un informe de la OEA que determina un grado de fraude que habilitaría una “segunda vuelta electoral” con la participación de los dos únicos candidatos: Evo Morales y Carlos Mesa. Este escenario también resultará por demás conflictivo, el momento en que el mismo candidato Mesa llegó a rechazar la auditoria de la OEA, mientras los sectores opositores no quieren saber nada con la OEA (liderado por Almagro, amigo político del presidente Morales). Ya hablan de “¡Ni MAS, ni Mesa!”, “¡Que se vaya Evo!” y “Nuevas elecciones generales”.

Por su parte los movimientos sociales ligados al MAS ya amenazaron con salir a las calles en caso de presentarse una “segunda vuelta”.

Parece que ambos escenarios no calmarían los conflictos sociales y se podría dar lugar a un “golpe cívico-militar”, según algunos analistas.

Escenario 3.

Surgió un nuevo actor político, Camacho,  quien desde los comités cívicos, con un discurso radical, exige la renuncia de Morales y la anulación de las elecciones. “Se nos agotó la paciencia, por eso con el movimiento cívico y las plataformas a nivel nacional hemos decidido radicalizar el paro cívico nacional indefinido”, indicó.

Y… “No me voy de La Paz hasta conseguir la dimisión del mandatario”

Es aplaudido por multitudes en los cabildos en Santa Cruz. Invoca a Dios y la biblia a cada instante, exige nuevas elecciones y solicita el retorno de los exiliados políticos de las épocas liberales (!)

No es de extrañar que algunos movimientos a nivel nacional apoyen a este político cívico para garantizar un “gobierno de transición” y obtener una cuota de poder.

Escenario 4

Se multiplican voces más sensatas para encontrar un salida constititucional, en que un Nuevo Tribunal Electoral llamaría a nuevas elecciones, con nuevos actores en el marco de una nueva Ley de Partidos Políticos, abriendo un verdadero  diálogo, más allá de los dos “bandos.

Peligrosa situación en que “lideres” de los diferentes bandos –antes de expresar una lucha abierta por recuperar una democracia plena- expresan una tendencia de mayor derechización, con el respaldo internacional de grupos políticos y organismos interesados en la desestabilización de Bolivia. Difícilmente se podrá esperar una reconstrucción de una verdadera democracia a partir de estos “bandos”.

¿UN camino?

un camino

“¿Quién se rinde?, ¡Nadie se rinde carajo!”, es el lema que se escucha en las calles de todo el país.

Un lema espontáneo que requiere ser transformado en un renovado camino de protesta y de reivindicaciones de la gente sencilla, de trabajadores del campo y de las ciudades.

En este marco son los activistas, organizaciones de derechos humanos, colectivos de resistencia, partidos de izquierda y militantes críticos a este peligroso escenario de los dos “bandos” quienes plantean lo siguiente:

  • Un llamado a nuevas elecciones, a partir de un Nuevo Tribunal Supremo Electoral independiente con nuevos actores populares en el marco de una nueva Ley de Partidos Políticos, abriendo un verdadero diálogo, más allá de los dos “bandos, rechazando enfáticamente la ola derechista, a la cabeza del bloque cívico.
  • Un rechazo al actual gobierno y sus aliados, impulsores de un modelo económico extractivista-capitalista, que incendió la chiquitanía, que impulsa mega proyectos con sus mega-negocios nefastos para la vida y que promueve el agronegocio con sus agrotoxicos cuestionados a nivel internacional.
  • Un alto a gobiernos entreguistas de nuestros recursos naturales a favor de las transnacionales. (minerales, petróleo, litio, bosques, agua y tierras)
  • Una recuperación de las organizaciones sindicales, obreras, campesinas, estudiantiles y populares, especialmente de la Central Obrera Boliviana COB, de las manos de la burocracia del MAS, garantizando una verdadera independencia política tanto de la oposición de derecha que ha alzado la cabeza, como del actual oficialismo; recuperando las organizaciones
  • Un repudio enfático contra las persecuciones a los dirigentes y bases obreras, campesinas e indígenas, judicializadas por luchar por sus legítimas demandas.

 

Un camino de paz y de liberación que significa una verdadera esperanza para el pueblo boliviano.

María Lohman
9 de noviembre de 2019