Se consolida bloque contrainsurgente
Haití invadida
Después del terremoto, tropas norteamericanas tomaron control de este hermano país, sin que ningún gobierno ni nadie hagan nada concreto para revertir esta situación. La acción neocolonial emprendida tendrá serias consecuencias para los pueblos de Nuestra América.
¿Qué podemos hacer? Mucho.
Para empezar, los gobiernos (“de izquierda”) de Bolivia, Brasil y Uruguay tienen tropas de ocupación en Haití, bajo la bandera de las Naciones Unidades. Si estos gobiernos pudieran reencauzar esta política colonialista, se podría poner en la agenda continental la necesidad del retiro total de TODAS las tropas de invasión sobre este país hermano, de manera de organizar una solidaridad realmente constructiva y pacífica.
Sin embargo, esta opción política pasa por poner un control a las Fuerzas Armadas de estos países que han encontrado en el envió de tropas de paz (léase invasión) una fuente inmensa de recursos económicos, a manera de soborno y compensación por “dejar al poder civil gobernar” estos países sin mayor problema. Las “misiones de paz” se han convertido en un negocio lucrativo para militares que consiguen ingresos adicionales, mantienen tropas en actividad de ocupación, renuevan material bélico, etc., creando y recreando una situación neocolonial aceptada por todos aquellos que se dicen “progresistas”.
En la actualidad se implementan casi una veintena de “misiones de paz” en el mundo, en países como Sahara, Haití, Congo, Burundi, Afganistán, Irak, Líbano, Sierra Leona, Eritrea, Kosovo, Liberia, Sudan, Timor Oriental, India y Paquistán, Georgia. En esas invasiones, participan diferentes fuerzas militares de diferentes países. En el caso de América Latina, para la gestión 2006, Uruguay fue el octavo país con mayor número de tropas en contingentes de paz en el mundo. Ello ha significado no sólo una participación grosera sino un ingreso económico concreto para los militares, llegando a afirmarse que equivale al monto por exportación de carde de ese país.
Fuente: Naciones Unidas. Global Peace Operations. Annual Review of. 2007.
Pero Uruguay no sólo participa con contingentes militares, sino que también ha hecho presencia con observadores en dichas misiones.
Otro país que ha tenido una participación importante en los contingentes de las misiones de Paz es la Argentina. La participación Argentina desde 1990 hasta 1998 se distribuyó a las diferentes Misiones de la siguiente manera:
Cuadro Nº 1, Participación en OMP, desde 1900 hasta 1998
Fuente: Soldados Argentinos por la Paz. La contribución del Ejército Argentino en la solución pacífica de los conflictos internacionales, Buenos Aires. 1998.
La cuantificación total de los ingresos que tuvo la Argentina, en el periodo comprendido entre 1990 y 1998, por concepto de participación en las misiones de Paz fueron los siguientes:
Cuadro Nº 2, Resumen total de los ingresos (en $us.)
Todo este dinero fue un ingreso neto (libre de impuestos) correspondiente a 69.306.690 dólares americanos de divisas que ingresaron al bolsillo de los militares.
Bolivia mantiene tropas en el Congo y en Haití.
Evo Morales, puede declarar a través de la prensa toda su indignación por la invasión yanqui a Haití, pero no deja de ser cómplice de la misma al mantener militares bolivianos en dicho país. ¿Qué moral se puede tener para condenar a los militares yanquis y mantener a los propios en este sufrido país?
Desde las organizaciones, necesitamos generar un espacio y una acción de solidaridad real con el hermano pueblo de Haití, más allá de las poses y los discursos.
¡Fuera todas las tropas de Haití (las “malas” y también las “buenas”)!
¡Que no se consolide la acción neocolonial.!